Cerro Punta es conocido como el granero de Panamá, ya que produce un gran porcentaje de las frutas y verduras que alimentan al país. La región ha sido explotada por sus ricos suelos y su clima fresco, que favorecen el crecimiento de algunos productos básicos que no se dan bien en los entornos tropicales habituales. Parece que lo único que detiene las pulcras hileras de los campos de hortalizas y los abultados invernaderos son los límites del Parque Nacional del Volcán Barú.

Rodeando la cima del Volcán Barú, el parque es un hábitat esencial para las aves endémicas de las tierras altas y migratorias, y actúa como corredor de vida silvestre que une las tierras altas de Chiriquí con el Parque Internacional Amistad, compartido por Panamá y Costa Rica. Es justo al otro lado de la frontera de este majestuoso parque de bosque nuboso, donde encontramos 4 de las últimas hectáreas boscosas de Cerro Punta.